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tus valores
PROGRAMA DE EDUCACIÓN EN VALORES PARA INFANTIL Y PRIMARIA
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Tutorías de reciclaje
Tutoría de evaluación
Objetivo: conocer a fondo al grupo de alumnos, descubrir sus fortalezas y debilidades para con ello saber ayudarles en todo aquello en lo que necesiten apoyo y ponerles un trampolín para que destaquen en lo que despuntan. Ideas clave: conclusión, estudio, evaluación. Recursos: resultados de las actividades sobre la prudencia que se hayan realizado en clase, sala de tutoría. Desarrollo: repasar los resultados de todas las actividades que se hayan realizado en clase sobre la prudencia tanto de manera individual como en grupo. Aprovecharemos las tutorías con los padres para ver cómo se ha trabajado en casa y poder usar su respuesta para nuestra evaluación. Si no es posible, podemos enviar una nota para que contesten varias preguntas sobre cómo han apreciado el trabajo sobre la prudencia desde la familia. En casa: se puede poner una nota a los padres en la agenda contando cómo ha ido el proyecto. Más: para ayudarnos a sacar conclusiones finales se puede elaborar un test sobre la prudencia basado en los temas que se hayan trabajado y pasárselo a los alumnos para que lo rellenen.
La prudencia
Si ser prudente es pararse a pensar en las cosas, en por qué las hacemos, entonces debemos pararnos un momento a pensar también por qué separamos los envases y por qué van a un contenedor o a otro. Veremos que con ese pequeño gesto conseguimos mucho por el planeta en el que vivimos. Una cosa tan sencilla como separar es lo más prudente para conseguir reducir el volumen de residuos de envases que, entre todos, generamos día a día. Y tambiény para reducir el consumo de materias primas, agua, energía y la contaminación que se producen cuando hay que fabricar nuevos productos sin hacerlo a partir de otros, es decir, reciclando. Cuando separas para reciclar, eres prudencia en estado puro, porque tienes la sabiduría de quien sabe proteger el planeta y su propia salud al mismo tiempo. Y si la prudencia también tiene algo de humildad, de reconocer que a veces no lo sabemos todo, entonces separar para reciclar es otro buen ejemplo para mostrarse prudente. A veces, como crees que sabes muy bien dónde van, por la costumbre, no piensas en los errores que podemos hacer sin querer y que pueden echar por tierra el esfuerzo y la colaboración de todos. Sé prudente y pregúntate siempre antes de depositar un envase lo que estás haciendo bien: primero, asegúrate de que es un envase y no cualquier otra cosa y, una vez tengas claro que lo es, mira todas sus partes y descomponlas para poner cada una en su contenedor. Y entonces sí, lo sabes muy bien: los envases de plástico, metal o brik al amarillo, los envases de cartón y el papel al azul, y los envases de vidrio, al verde. ¡Eso es ser prudente!
CURSO 2015-2016
TUTORÍAS CON SENTIDO PARA TODOS LOS CICLOS EDUCATIVOS
